Es una galleta de mantequilla salada o bien con un toque de sal, muy crujiente y esponjosa, además al llevar harina de almendra resulta muy sabrosa.
Os sorprenderá lo fácil que es realizar estás galletas de mantequilla, pero lo más sorprendente es que están tan buenas que no puedes parar de comer.
100 g de harina
65 g de mantequilla
45 g de azúcar glas
20 g de yema
30 g de harina de almendra
2 g de sal
1º Blanqueamos las yemas con el azúcar e incorporamos la mantequilla. (batir con varilla yemas y azúcar)
2º Añadimos la harina de almendra y mezclamos.
3º Ponemos la sal en la harina e incorporamos a la mezcla anterior, cuando esté amasado formamos una bola que envolvemos en film y refrigeramos. Dejamos en el frigorífico como mínimo media hora. Mejor si la utilizamos pasadas veinticuatro horas.
5º Con el rodillo de amasar daremos unos golpes e iremos extendiendo hasta formar una placa que cortamos con el molde deseado.
El horno tiene que estar a 170ºC.
Horneamos aproximadamente 10 minutos dependiendo del grosor de las galletas.